Escucho a mi sabia presencia decir que...

Un jóven piloto probaba un frágil avión monomotor en una peligrosa aventura alrededor del mundo.Poco después de despegar de uno de los pequeños e improvisados aeródromos, oyó un ruido extraño que venía de detrás de su asiento, se dió cuenta que había una rata a bordo y que si roía la cobertura de lona, podía destruir su frágil avión...Podía volver al aeropuerto para librarse de su incómodo, peligroso e inesperado pasajero, pero tambien podria asi frustrarse su mision... De repente recordó que las ratas no resisten las grandes alturas. Volando cada vez más alto, poco a poco cesaron los ruidos que ponían en peligro su viaje. Si amenazan destruirte por envidia, calumnia o maledicencia, Si te criticaran con maldad: ACUERDATE SIEMPRE QUE LAS RATAS NO RESISTEN LAS GRANDES ALTURAS...
por eso: ¡Vuela! ¡Cada vez más alto!

Por CRISTINA RUIZ (la pintora del amor)

Escribo esto para exorcisarme de ti, para quitarme la pesada imagen que pudiera caer sobre mí, imagen de ti.
Me arranco las palabras, todo pensamiento, toda visión; me deshago de esta carga, me lavo las manos, ya no quiero la punzante duda, ni siquiera la más mínima idea; no quiero tu cara viéndome; quita de mí tu espada, no quiero beber tu fatídico veneno,no intentes...ni siquiera lo intentes...
Mis dedos expulsan estas palabras para liberarme de ti.
Yo te obligo a permanecer en tu sitio, no intentes dar un solo paso hacia adelante
Ya estoy libre de tu halo maldito.
Todo queda aquí, justo aquí, atrapado entre letras muy faltas de sentido.